Menorca es la segunda de las Islas Baleares. Los menorquines somos hospitalarios y presumimos de historia, monumentos megalíticos, caballos y gastronomía, playas y sol y, desde el año 1993, de que la UNESCO nos declaró Reserva de la Biosfera. Se conocen nuestros zapatos y abarcas, bisutería y queso. Queremos que la isla se conserve como es y, mientras invitamos a que nos visiten, queremos que los viajeros, muchos, la quieran como nosotros. Este blog pretende transmitir ese sentimiento.
sábado, 25 de enero de 2014
martes, 21 de enero de 2014
El azul del cielo del invierno mediterráneo
He vivido en varios continentes, he viajado a muchos países,
he visto muchos cielos pero ninguno tan azul como el del invierno mediterráneo.
Ese cielo azul que en Menorca se expresa a tope especialmente en días
claros del mes de enero. Tal vez eso no tiene sentido, o tal vez sí y hay una
explicación "científica" conocida. En todo caso, esos días claros y frescos (no
digo fríos, porque los fríos de verdad no han llegado todavía) son fantásticos. Un color azul brillante que contrasta
con los campos verdes, con el perfil ondulado del paisaje e incluso con el azul del mar. Un color
azul que durante el día nos descubre los secretos de las “montañas de
Mallorca”, como solemos llamar al horizonte de la isla vecina vista desde el
sur oeste, y por la noche una infinidad de estrellas.
jueves, 16 de enero de 2014
“Diada” del pueblo de Menorca
El 17 de enero es la fiesta de Menorca. Celebramos a nuestro santo patrón, San Antonio. Cuenta la historia que el 17 de enero de 1287 desembarcaron las tropas cristianas al mando del rey Alfonso III para conquistar la isla que estaba en poder de los musulmanes. Alfonso III replegó a los musulmanes en el castillo de Santa Águeda, actualmente en el término municipal de Ferrerías, y consiguió su rendición.
Aunque hay actividades festivas en toda la isla, la celebración es más sonada en Ciutadella, donde se hace la procesión de “los tres toques” conmemorando la entrada del rey Alfonso a la ciudad para rendirla y representando los tres golpes que el rey dio a las puertas de las murallas de la medina, en la que hoy en día es la plaza de Ses Palmeras.
En los pueblos se hace una “torrada” de sobrasada y se bendicen los animales, tradiciones que deben estar relacionadas con el cerdo que suele acompañar la representación de San Antonio. Se aprovecha la fiesta para organizar más actividades de entretenimiento en los días anteriores y posteriores. Ayuda el hecho de que el día se va alargando, según el dicho local “per Sant Antoni, una passa de dimoni”, será porqué el demonio tiene las piernas largas….
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